El hechizo de tus ojos desvanece
como arena entre los dedos
como aquello soñado, a la mañana siguiente
como aquellas a las que he amado
y seguiré amando.
así se fue el hechizo de tus ojos.
Te vas quedando
poco a poco, paso a paso
con mi cordura
la poca que quedaba
pero ahí está
Paf!
y ya no queda.
El recuerdo de tu roce
eco de caricias pasadas
resuenan en anhelantes oídos
se mantienen, desafiantes, en los portales
portales de la memoria
preludio al olvido.
Te extraño y no
y es que la contradicción mente corazón
ganaprudencia
deseopaciencia
no funciona conmigo.